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sábado, 25 de abril de 2020

Casi lista la vacuna contra el coronavirus

El director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, indicó que hay un consenso en la comunidad internacional para acelerar la creación de una vacuna contra el coronavirus SARS-CoV-2 que produce la enfermedad del covid-19.

Hasta el día de hoy los chinos han desarrollodo dos vacunas que han sido probadas hasta la etapa dos, de igual forma cuentan con la infraestructura industrial necesaria para fabricar la cantidad suficiente para abastecer la demansa mundial.


Mientras se daba a conocer la buena noticia se informó que Estados Unidos no participará en dicha iniciativa, el presidente Donald Trump se ha mostrado escéptico y renuente a propiciar un acercamiento con la OMS.

En un mundo globalizado, interconectado y ante una pandemia que amerita la cooperación de todos, vuelve el presidente estadounidense a demostrar serias falencias para integrarse en la lucha contra el covid-19. Continúa Donald Trump revelando su visión unilateral en este mundo globalizado.

Ojalá el presidente de Estados Unidos asuma el compromiso de trabajar todos juntos para derrotar el covid-19.

Datos importantes de Donal Trump.
1) El presidente Trump suspendió los fondos a la OMS.
2) Matiene embargada a Cuba, Venezuela, Iran, Corea del Norte.
3) Impide la llegada de medicamentos en esos países para enfrentar el covid-19
4) Planteó la posibilidad de inyectar detergentes a los enfermos de covid-19.
5) La ciudad de New York se convierte en epicentro del covid-19 al tener más casos de ese enfermedad que paises enteros.




domingo, 19 de abril de 2020

Donald Trump for president again?



Estados Unidos es el país con los peores datos estadísticos contra el coronavirus, en este preciso momento más de 700 mil norteamericanos han sido contagiados con covid-19 y casi 40 mil han perdido la vida; la administración Trump le ha ido muy mal luchando contra el enemigo invisible.


Aunque las cifras oficiales revelan el desastroso resultado que ha tenido Donald Trump en el manejo de la crisis, el norteamericano promedio no sabe lo que verdaderamente está pasando en su país. 

Los estadounidenses rompen todos los records estadísticos del covid-19, como, por ejemplo, EEUU ya es el país con más contagiados, con más fallecidos y el que más fallecidos ha tenido en un solo día; mientras en países como China, Rusia, Corea del Sur y Japón el total de fallecidos de todos ellos juntos es menor a 5 mil decesos y la cantidad de contagiados es inferior a 140 mil casos, mientras en esos países las cosas van así, en Estados Unidos todo parece estar fuera de control.

Ante resultados tan distintos entre los países ya mencionado y los estadounidenses, además de que estamos en medio de una campaña electoral, el presidente Trump realiza todo el esfuerzo habido y por haber para evitar un desmoronamiento de su ya mermada popularidad.

Su estrategia siempre ha sido la de ir a la ofensiva, atacando, atacando y acorralando su rival, sin importar que tenga que hacer o decir, para Trump los límites no existen, al final es de los que piensan que el ganador escribe la historia y que si el resulta victorioso todo lo que hizo lo hizo bien.

En esta ocasión como en casi toda su vida, el mandatario ha abierto varios frentes, su ataque despiadado ha sido dirigido contra otras naciones, contra los gobernadores estadounidenses, contra el Partido Demócrata, contra la Organización Mundial de la Salud (OMS), contra todo el que se meta en su camino, contra todo el que represente un peligro a su proyecto, porque la naturaleza de Trump no es hacer sinergia, no es buscar consenso, no es trabajar juntos, desde que el presidente es un jovencito su vida ha estado caracterizada por encabezar esas luchas a muerte donde el enemigo o muere o lo mato, Trump es un especialista dividiendo para vencer. Y esta ocasión no es la excepción, por eso se enfrenta a todos, a sus aliados, a sus rivales, a los organismos internacionales, a la comunidad internacional, porque necesita un culpable, necesita un sustituto que cargue con el desastre provocado el y el coronavirus, y quien mejor que China para esto.

China es el enemigo perfecto, recordemos que el gigante asiático se ha convertido en un peligro para Estados Unidos, para su poder hegemónico, para su política internacional, para el unilateralismo estadounidense, y como China, además de ser mi rival económico y militar, sería muy interesante en convertirlo en el responsable de todo lo sucedido, pero eso no es suficiente, necesito buscar un cómplice, y cataplun, EEUU acusa y retira el financiamiento a la OMS. La acusa de desinformar y entrar en contubernio con China, por tal razón es corresponsable junto a China del fracaso de Estados Unidos contra el covid-19.

Un verdadero plan maestro de Donald Trump, recordemos que durante toda su vida ha tenido como estrategia la de divide y vencerás, golpea duro y caerá, difama que algo queda, y, acusa, acusa y acusa que lo importante no es ganar, sino, hacer creer que ganaste.

La forma en que Trump ha enfrentado el coronavirus ha sido desastrosa, la cantidad de contagiados más la enorme cantidad muertos indican que Estados Unidos fue el país que peor ha manejado la crisis.

Nota:
1)   La comunidad internacional ha pedido al presidente Trump no politizar la pandemia.
2)   La mayoría de líderes mundiales han condenado que Trump haya suspendido el financiamiento a la OMS.
3)   Los gobernadores estadounidenses no están de acuerdo con el presidente Trump.
4)   La OMS solicito a Trump parar de nombrar el virus por su lugar de origen.
5)   China condena que Trump vincule el virus a su país.
6)   Rusia, China y la Unión Europea condenan que Trump continúe con el embargo contra Cuba, Venezuela e Iran en medio de la desgracia del coronavirus.
7)   Trump impide la entrada de medicamentos a Cuba para enfrentar el coronavirus.








sábado, 11 de abril de 2020

Fraude y mal manejo de fondos.

¡Ya! ¡no aguantamos más!

En las últimas horas hemos visto como la pandemia del covid19 avanza lentamente pero constante, la cantidad de contagiados, el número de fallecidos y los recuperados aumentan progresivamente. Aunque la situación parece controlada, indudablemente que no está bajo control.

La gente espera con ansías el boletín de las 10 de cada mañana, necesitan saber, si por fin las cosas empiezan a cambiar.

A esa ansiedad se suma, la cantidad de denuncias de ciudadanos de escasos recursos llorando en las redes exigiendo a las autoridades que se le realice la prueba, otros casi nos sacan lagrimas mientras solicitan que los atiendan, que los ayuden, que ya no aguantan más, preguntando a todo pulmón que si lo van a dejar morir, que hagan algo. Imploran que compartan sus videos, que los ayuden. La desesperación en su máximo esplendor!!

Y como si todo eso no fuera suficiente en este ambiente de terror que vivimos, abundan las denuncias de irregularidades en las compras y contrataciones de insumos y protección médica para suplir los hospitales. 

La Dirección de Compras y Contrataciones ha tenido la obligación de rescindir los últimos contratos entre el Estado y las empresas suplidoras. Las denuncias de irregularidades realizado por el periodismo de investigación revelan la sobrevaloración de precios, tráfico de influencias y el mal manejo de los concursos para abastecer los hospitales y la cadena de defensa contra el virus .

Esos errores han dejado al descubierto el espíritu malévolo de quienes tienen la responsabilidad de resolver el problema que ha creado la pandemia, además, dejan al descubierto la falta de solidaridad de quienes están obligados a actuar con transparencia, desprendimiento y solidaridad. 

Esperamos que esto no vuelva a suceder, espramos que recaiga todo el peso de la ley para quienes, aprovechando la desgracia nacional, tratan de sacar provecho económico en medio de todo esto.

Quédate en casa que de esto hay que salir rápido.

sábado, 4 de abril de 2020

El coronavirus, la gran batalla


Coronavirus, la gran batalla
Coronavirus, la gran batalla.

Las teorías de conspiración han resurgido con más brío que nunca, con el surgimiento de la pandemia del covid19 los conspiranoicos han realizado todos los esfuerzos habidos y por haber para dejar en la mente de la gente la idea de que todo lo que sucede fue realizado para disminuir la población mundial, otras hablan de una lucha entre las grandes potencias por establecer un nuevo orden mundial, en algunos casos acusan a China de crear el virus para asumir el control geopolítico y hegemónico del mundo, en otras se plantean que todo es parte de un plan de los Estados Unidos para rezagar el inminente ascenso de China como potencia dominante en el espectro geopolítico mundial.

Las teorías de conspiración han dispuesto de todo su talento para dejar en las mentes de los seres humanos una que otra cosa, cada quien defendiendo sus intereses.

Pero las campañas de conspiración no han quedado relegada a estos medios, con el covid19 las cosas han llegado más lejos, pues las grandes potencias se han acusado mutuamente, como por ejemplo, el presidente de Estados Unidos en diferentes ruedas de prensa nombró el covid19 como el virus chino, esto produjo una reacción inmediata China quien alertó a la Organización Mundial de la Salud  por atribuir el nombre del virus a un pais o región, en franca violación a lo que establece ese organismos.

Eso provocó la reacción del director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien inmediatamente condenó la manera en que el presidente de Estados Unidos nombraba el covid19, asegurando que los pronunciamientos de esa índole son capaz de fomentar la xenofobia, calificándolo de incorrectos y violatorios de las reglas establecidas por la OMS, al mismo tiempo solicitó parar inmediatamente con ese tipo de pronunciamiento.

En fin, el coronavirus nos muestra que en el mundo se libran varias batallas, la de la crisis sanitaria, la economía y social y la pugna entre las grandes potencias quienes se acusan mutuamente para atribuir el nacimiento covid19 a una región o país, tratando de encontrar culpables donde realmente nadie lo es.

Mientras todo eso sucede, la OMS traza las pautas generales para enfrentar la pandemia, lo que ha hecho posible dividir esta lucha en dos grandes grupos de países, el de los países orientales encabezado por China, Corea del Sur y Singapur y los países occidente encabezado por Estados Unidos, Alemania, Francia, Italia y España.

Los orientales han sorteado el coronavirus con cifras oficiales excepcionales, revelan un manejo correcto de la crisis, y por el otro lado occidente que evidentemente han sido incapaz de enfrentarla correctamente.

La enorme diferencia en cuanto a los resultados obtenido por los orientales y el fracaso de occidente, me ha motivado a plantear una serie de hipótesis que comparto con ustedes para analizar.

El 3 de agosto de 2018 visité la República Popular de China, donde participé en el "Seminario sobre el Desarrollo Económico y las Políticas Sociales" auspiciado por el Ministerio de Comercio de la R.P.C. en esa oportunidad puede conocer la cultura, su historia, sus grandes monumentos, la aplicación de sus políticas públicas y la forma de vivir e interactuar de los ciudadanos.

En base a esas vivencias he elaborado una  serie de hipótesis que plantea las diferencias marcadas que distinguen a los orientales de los occidentales y que posiblemente haya sido la clave del éxito para enfrentar el coronavirus:

1) Los chinos a diferencia de los occidentales no tienen contacto físico cuando se saludan. Mientras los occidentales se aprietan las manos, se abrazan y/o se besan, los asiáticos se inclinan y saludan. La nulidad del contacto físico puede haber jugado un roll importante en la su lucha, debido a que, el distanciamiento social que tanto sugiere la OMS es un comportamiento natural en oriente.

2) Mientras los chinos han, prácticamente, sustituido el uso de papel moneda, los occidentales mantienen el uso en casi todas las actividades económicas. El uso de aplicaciones para comprar, posiblemente influya en los buenos resultados que han recelado las cifras de los asiáticos.

3) Mientras en China una familia de cuatro generaciones puede llegar a tener entre 5 a 10 miembros como máximo, en el caso de occidente estaríamos hablado de 25 a 200 miembros. El contacto familiar es casi inexistente en China y facilita el aislamiento, todo lo contrario, sucede en occidente.

4) Mientras en China las autoridades pasan a ser casi desapercibidas y los ciudadanos conocen más a sus instituciones que a sus incumbentes, en occidente sucede todo lo contrario.
Lo que trae como consecuencia que los chinos crean y trabajen en conjunto con sus autoridades, depositando toda su confianza y apoyo a las políticas públicas, los occidentales conocen más al ministro que al ministerio, lo que lo coloca en una lucha continua de intereses, trayendo como consecuencia que toda iniciativa gubernamental, enfrente primero el problema de los intereses de grupo y luego deben enfrentar el problemática. En el caso de enfrentar el virus, posiblemente esta lentitud que tienen los occidentales para consensuar la acción, haya hecho perder un tiempo importantísimo para combatirlo.

5) Además, en los países orientales sucede algo muy particular y que posiblemente haya sido fundamental en la lucha exitosa contra el coronavirus, ha sido que el sistema sanitario, por ejemplo el de China, su red de salud se fundamenta en la prevención, la misma está intercomunicada y permite al Estado conocer quien tiene gripe en una de los campos más remotos y quien padece la misma enfermedad en una de las grandes urbes, su política sanitaria se fundamenta en a la prevención, el Estado es garante de la salud general, por ende, toda iniciativa de salud recae en sus manos. En occidente las cosas funcionan al revés, la salud preventiva no existe, las grandes corporaciones farmacéuticas han diseñado un sistema donde los enfermos son el gran negocio. Mientras en China las enfermedades acarrean un alto costo para el gobierno, en occidente las enfermedades generan grandes ganancias para las farmacéuticas.

6) Mientras en China la big data está en manos estatal y en occidente sucede todo lo contario, está en manos de las grandes empresas del sector privado, como facebook y otras más.

Como la big data es estatal, posiblemente el gobierno de china la utilizó para dar seguimiento a los contagiados por covid19, investigando donde estaban, quienes son, con quien se reunieron, si compraron medicamentos, que compraron, entre muchas cosas más, lo que hizo posible hacer un mapa biológico de posibles contagiados. Mientras eso, posiblemente pasaba en China, en occidente el uso de la big data se resumió a saber que productos necesitaban los internautas para sugerir productos similares y aumentar el consumo. En occidente la big data se utiliza para fomentar el comercio y posiblemente no se haya aplicado para investigar el comportamiento del virus.

7) Mientras en China,  inmediatamente se conoció la existencia del virus, el gobierno aisló la zona, al mismo tiempo empezó a identificar los contagiados haciendo pruebas, pruebas y más pruebas,  para inmediatamente aislarlos y, si es necesario, hospitalizarlos, sin importar el costo económico y político, colocando la salud pública por encima del interés económico,  los países de occidente han perdido un tiempo precioso discutiendo entre gobierno y oposición, cuales medidas son las idóneas para enfrentar la situación, una lucha que revela que en occidente el interés particular está por encima del bienestar social.
Posiblemente la victoria de China contra el coronavirus radique en su forma de gobierno, en su manera de ver la salud pública como la materia prima fundamental para tener una sociedad saludable, capaz de disponer de todas sus energías para impulsar el modelo económico que lo ha convertido en una potencia mundial, quizás haya sido el uso correcto de la aplicación de la big data para lograr el bienestar de todos, posiblemente haya sido que todas esas hipótesis se hayan aplicado a cabalidad,  pero de lo que no nos queda la menor duda es, que China salió airosa en la lucha contra la pandemia, que debe ser consultado para saber qué fue lo que ellos hicieron que otros no han hecho, para que, cuando vuelva otra situación similar, todos hagamos lo mismo que hizo China para derrotar el coronavirus.

Abro el debate.